miércoles, 15 de abril de 2009

El encaje de los tiempos

Pocos días después de finalizada la exposición "El lugar de la feliz llegada" -marzo 2008- en la galería René Metras de Barcelona empezaron a surgir los primeros proyectos para "El encaje de los tiempos"











Al principio todo parecía bastante claro para mí. El trabajo respondía básicamente a dos preocupaciones, una antigua pulsión por mezclar la figura femenina con la abstracción -tengo collages sobre esto de finales de los setenta, antes de retomar la pintura- por una parte y por otra reunir mis dos etapas más recientes como pintor para comenzar una reflexión sobre las relaciones entre ambas.
Ha sido al profundizar en el trabajo con un buen número de proyectos y diez nuevos óleos cuando las cosas se han vuelto más complejas.

Recordaba, mal, una frase escrita por el poeta Ángel Crespo con motivo de una jornada de puertas abiertas en mi estudio en 1994.
Mi memoria me había jugado una mala pasada y en mi evocación decía así: gracias por pintar un ángel. Al rememorar este escrito apareció como un relampago otra de mis obsesiones: la Anunciación. Tema sobre el que no he dejado de trabajar sin que casi nadie lo haya advertido. La Anunciación no en el sentido estrictamente católico, sino más bien sufí, esto es la corporación en el cuerpo de la mujer de lo inefable. Especialmente apareció en dos obras con dos figuras femeninas confrontadas. "El encuentro" y "La fruta coronada", donde una de las mujeres asumía el papel de Ángel. También en el conjunto de la serie "La espera", pero aquí aparecía únicamente la mujer, en actitud precisamente de espera -antes de-. Eso sí con elementos propios de la iconografía del tema: libros, etc.

Así que pensé que quizá "El encaje de los tiempos" no era sino una sucesión de nuevas anunciaciones, en las que el elemento abstracto era el Ángel.
Pero ya he dicho que mi memoria me había traicionado y lo que realmente el poeta había escrito era gracias por pintar el alma.



El encuentro 200 x 300 cm. Óleo sobre tela, 1998

La fruta coronada 200 x 400 cm. Óleo sobre tela, 1999/2000

La espera-II 150 x 195 cm. Óleo sobre tela, 2002

Esto ha hecho dar un giro a mi percepción. Quizá la figura esté en compañía de su alma o de un alma.

El 7 de mayo inauguro una exposición en la Galería Canals de Sant Cugat con practicamente la totalidad de esta nueva serie. Termino esta entrada con una de las obras.

El encaje de los tiempos-7 120 x 120 cm. Óleo sobre tela, 2008/2009